1/12/09

Las palabras, el lenguaje y los símbolos II


“Y daréis cuenta por cada palabra inútil. Todas la cosas por El (el Verbo, la palabra, el Logos) fueron hechas”. Cristo


Palabras y símbolos:

Son complementarios, el lenguaje es analítico, discursivo como la razón, el simbolismo es sintético, es el punto de apoyo a la intuición, esta por encima de la razón, abre posibilidades ilimitadas. El lenguaje tiene significaciones definidas y fijas, pone límites al entendimiento, los símbolos comunican las verdades más altas, de origen no-humano.

René Guenón.


La transmisión de las enseñanzas:

Hay tres modos de enseñanza en el Tíbet, estos son, por órden de excelencia: 1) la enseñanza comunicada en silencio, en la que el discípulo comprende, por telepatía, lo que el maestro le quiere enseñar. 2) La enseñanza impartida por medio de signos, cuyo significado debe captar el discípulo (muy usada en el budismo zen). 3) Finalmente, en el grado inferior, la enseñanza impartida del modo corriente, por discursos que el discípulo escucha.

Alexandra David-Neel


La Palabra Perdida:

Hubo un tiempo en que el hombre poseía una palabra mágica que, al pronunciarla, adquiría el poder de realizar fenómenos maravillosos, tales como hacerse invisible, obtener una alfombra mágica para transportarse a lugares lejanos, otorgar la salud, multiplicar sus fuerzas, conocer lo oculto y lo manifestado, y obtener todo lo que deseara su corazón. Pero el hombre de hoy olvidó la manera de pronunciar esa palabra, desde el momento en que su codicia le hizo olvidarse del buen uso que tal poder le concedía. Esta palabra se llama hoy La Palabra Perdida. Pero cabe preguntarse ¿Qué hay en el interior del hombre que puede ser despertado por medio de la palabra, y que una vez despertado le comunica un poder ingente del que no dispone en su estado normal?

“La Magia del Verbo”, Dr. Jorge Adoum.


El Árbol de la Vida o Libro de la Vida:

“El Universo es un inmenso libro, los caracteres de este libro son todos escritos, en principio, con la misma tinta, y son transcriptos en la Tabla Eterna por la pluma Divina. Todos son transcriptos simultáneamente e indivisiblemente, por eso es por lo que los fenómenos esenciales divinos, ocultos en el secreto de los secretos, tomaron el nombre de letras trascendentes. Y estas mismas letras trascendentes, es decir, todas las criaturas, después de haber sido condensadas virtualmente en la omnisciencia divina, son descendidas por el soplo divino, a las líneas inferiores, y han compuesto y formado el Universo manifestado”.

Mohyiddin ibn Arabi


Algunas definiciones:

PADRE Y MADRE: Sabiduría e inteligencia, cuarto día del Génesis, el sol y la luna, oro y plata.

EL HIJO DEL HOMBRE: El hijo interior que todo hombre debe parir.

LA PIEDRA ANGULAR: En hebreo “Eben,” viene de Padre: “Ab” y de Hijo: “Ben”.

EL CAMINO DE LUZ: Aceptar no conocer ni comprender nada, no contar con ninguna seguridad, aceptar lo inaceptable.

LAS NUEVE BIENAVENTURANZAS: Inician la predicación de Jesús, responden íntimamente a las  primeras plagas. Jesús enseña el camino hacia la realización, salvación = realización.

AMOR VERDADERO: “Que la energía divina creadora sea”. En la unidad, el Uno, Dios, podemos leer Amor (“AHABAH”, en hebreo), en que el Padre (“Ab”) se manifiesta y se da su creación en sus dos manos: el Hijo y el Espíritu Santo.

LA CIRCUNCISIÓN: Representa cortar las tinieblas que recubren la Luz. El sexo es símbolo de Luz, del Verbo. En una primera etapa, el hombre es pro-creador por el sexo, en la segunda parte de su vida se vuelve creador por el Verbo.

LA TÚNICA DE PIEL: Símbolo de la condición animal, la servidumbre.

EL BAUTISMO: Sumergirse en las energías no realizadas para re-vertirlas con un movimiento justo hacia su fuente divina y convertir las tinieblas que ellas son, en Luz.

LA TIENDA: Símbolo del Santuario interior.

MACHO-HEMBRA: Consciente – inconsciente; realizado – no realizado. El costado (no la costilla) representa la parte hembra, el aspecto no realizado del sí mismo.

EVA: El nombre dado por Adán a su fuente de vida y que le permite cumplir su vocación de maternidad en sí mismo después de atravesar las barreras que lo separaban de ella, de sí mismo.

LAS LETRAS: Son herramientas de Dios, en la tradición hebrea las 22 letras contienen todas las energías creadas, iconos de las energías in-creadas.

HERMES (TOHT): El mensajero de los dioses, preside nuestro destino.

EL SUFRIMIENTO: Consecuencia de la reducción de lo divino a nuestras categorías banales, a menudo en forma in-consciente.

EL NOMBRE SECRETO: El nombre usual designa a la persona social, el nombre secreto representa el núcleo del ser, la simiente. Conquistar el re-nombre en el exterior, en lugar del nombre verdadero, solo contiene la presencia del hijo. Pero estos hijos no están unidos por la conciencia del Padre, la unidad que los recubría, entonces se vuelven extraños unos con otros, se dispersan y comienzan las rivalidades, las relaciones de fuerza y la competencia, la guerra.

El hombre que se vuelve consciente y construye su nombre busca la calidad de Hijo en el núcleo de su ser, a imagen de Dios. Piedra, “EBEN” en hebreo, deriva de “AB”, Padre y de “BEN”, Hijo. El ladrillo, “LABENAH” solo contiene al hijo, “BEN”.

EL CAMELLO: GIMEL en hebreo, es símbolo del movimiento que lleva del 2 al 1. Simboliza al hombre en marcha hacia la Unidad final, es el símbolo de la fecundidad. En cada etapa del camino, el hombre se trae a sí mismo al mundo, a una nueva dimensión de sí mismo, fruto del matrimonio de lo húmedo de sus profundidades (la no-realización, las aguas de abajo), que se convierte en tierra interior (la realización, lo seco, la tierra), y de las aguas de arriba que bendicen. En el 3° día de la Creación: la tierra, lo seco, es el principio de la energía realizada, lo húmedo, el agua, es principio de esa energía aun no-realizada. 

La sed: el agua esta dentro de uno mismo. La experiencia del desierto exige una más alta dimensión de uno mismo. El gimel conduce al que asume la pobreza o el despojamiento, hacia la riqueza; gimel: crecimiento, elevación, salvación. La pobreza y la salvación se reúnen en una palabra en hebreo: GAD, que significa felicidad, invertida significa pez. La felicidad como realización implica un punto de partida en el gérmen, el pez, estado en el cual se vive el despojamiento, la pobreza.

Madurar es dejar los alimentos exteriores y empezar a descubrir los interiores, es la necesidad interior de cambiar de tierra (campo de consciencia), partir es entonces la búsqueda creadora como experiencia de separación.
El fruto último es el niño divino, la unidad conquistada más allá de toda dualidad.


“EL Egipto Interior”, “La Letra, Camino de Vida”, Annick de Souzenelle.


2/11/09

La consciencia de unidad


Nacer y vivir, como partir a un largo viaje, es empezar a olvidar, pero también es el primer paso para comenzar a re-cordar (volver a pasar por el corazón).


Se percibe como algo muy difícil y complicado desarrollar y experimentar una conciencia de unidad en un mundo de aparentes dualidades y de supuesta separación, sin embargo si podemos ver que este sentido de unidad nos da la posibilidad de relacionarnos y comprendernos más y mejor entre nosotros y con Todo lo que hay, si podemos empezar a visualizar que puede hacer que nuestra vida y la de los demás sea más armoniosa y plena, más pacífica y feliz, entonces estaremos dispuestos e inspirados a realizarla.

Desde una perspectiva espiritual, del ser interior, no podemos sino sostener que somos un alma, un espíritu, una conciencia, o como quiera llamársela, que habita en un cuerpo físico y que viene a este mundo de la manifestación a experimentar lo que de otro modo, nunca podría vivenciar.

A partir de este principio, y aunque pueda parecer obvio por lo general núnca lo es, ya podríamos deducir que nuestro ser interior, como tal no tiene ego ni personalidad, no es masculino ni femenino, ni bueno ni malo, no tiene raza ni religión, simplemente es, es una parte del Todo; mientras que el cuerpo físico, nuestra túnica de piel humana, se manifiesta como macho o hembra, con una forma, un carácter, una personalidad, etc.

Así, si podemos comunicarnos y relacionarnos de corazón a corazón, de alma a alma, establecemos un vínculo donde no intervienen la dualidad, las creencias, las opiniones, los deseos, las diferencias, la mente analítica con sus limitaciones, hábitos, esquemas y vicisitudes, es en verdad otro idioma.

Nuestra cultura, a través de eónes, nos enseñó la necesidad y la felicidad de lograr complementarnos externamente, y básicamente, a través de la unión con alguien de otro sexo, mas precisamente del sexo opuesto.

Sexo opuesto o complementario? En verdad los géneros más que opuestos son, o deberían ser, complementarios, sin embargo todavía se mantiene enquistada la visión de las conductas opuestas o contrarias. Y a pesar de algunas proclamas de reconciliación, en la intimidad de la casa en general se sostiene la necesidad y conveniencia social de los opuestos.

Y esto es así porque se ve todo desde la perspectiva del logro exterior y el rol social, no recordamos nuestro ser interior y la consciencia de Unidad. Lo que nos separa de los demás es el hecho de percibir solamente sus uniformes de piel humana, sus egos.

Desde el punto de vista energético, todos recibimos energía yin o femenina de la tierra, la materia prima para la supervivencia, los instintos, etc., y energía yang o masculina desde el cielo, sutil, espiritual, etc., sin estas dos clases de energía no podríamos funcionar físicamente, todo en el mundo de la manifestación que hoy conocemos, funciona así. Quienes desarrollan disciplinas holísticas como la acupuntura, el do-in, el shiatzu, el yoga, la gemoterapia, etc., saben de la importancia de mantener el equilibrio y la armonía energéticos como medio de conservar la salud física, mental y espiritual.

Una energía no es mejor que la otra, las dos son necesarias y en equilibrio, son en verdad complementarias. Seria inútil intentar alcanzar estados superiores o espirituales de conciencia, sin antes haber ordenado los aspectos terrenales, los chacras inferiores. El siguiente paso es equilibrar el aspecto material con el espiritual, “para llegar al cielo, hay que pasar primero por el infierno”.

Las cualidades energéticas no tienen que ver con los géneros, ni con los egos, algo que suele ser difícil de entender porque siempre suponemos que, por ejemplo, toda mujer en tanto que perteneciente al género femenino, debe ser yin, y desde ya lo mismo, al revés, sucede con los hombres que por supuesto deben ser yang.

No hay nadie que sea completamente yin, ni alguien que sea completamente yang, lo más común es que tengamos un predominio de uno de los dos tipos de energías. Así también, en algunos aspectos de nuestra vida podemos asumir conductas más yin, y en otros tener una actitud más yang.

Cuanto más logremos armonizar y equilibrar nuestras energías, por ejemplo a través de ejercicios para los chacras y los meridianos,  más cerca estaremos de salir de la conciencia de polaridad, de separación.

Cada hombre y cada mujer deben primero conquistar y realizar en sí mismos, en su interior, su propio aspecto energético complementario para salir de la conciencia de dualidad, solo así podrán volver a ser Uno en sí mismos para después poder experimentar la unidad con Dios, el Gran Espíritu, con el Todo. Es un trabajo que se debe realizar internamente, en uno mismo, nadie nos puede dar este don.

Solo realizando la unidad en nosotros podemos llegar a ver al otro como un alma, una consciencia trascendente, como una parte del Todo que habita en un cuerpo físico, y no solamente como un cuerpo que tiene un ego, una personalidad y un género. Solo así podremos empezar a relacionarnos de corazón a corazón, en el sentido de lo más esencial, y entonces también llegaremos a sentirnos Uno con nuestra Tierra y con el Universo.

20/10/09

Construyendo los cimientos: la formación temprana


“Si hoy te encontraras con el niño que una vez fuiste, y él te preguntara qué es lo más importante que aprendiste a lo largo de tu vida, ¿qué le responderías?“ Richard Bach


“Hay mucho más en la Tierra y en el Cielo de lo que nuestros padres pudieron enseñarnos, pero ellos no recordaban”.



Los niños aprenden lo que viven:


Si viven criticados, aprenden a condenar.


Si viven con agresividad, aprenden a pelear.


Si viven avergonzados, aprenden a sentirse culpables.


Si viven apreciados, aprender a apreciar a los demás.


Si viven con estímulos, aprenden a confiar.


Si viven con seguridad, aprenden a tener fe.


Si viven con aprobación, aprenden a quererse.


Si viven con aceptación y amistad, aprender a hallar amor en el mundo.


Si viven con equidad, aprenden a ser justos.


Si viven con tolerancia, aprenden a ser tolerantes.



"Cada momento y en todo lugar, hay alguien que sufre y gime por querer sentir sobre su piel lo que nunca ha tenido, lo que siempre ha esperado...y eso es amor. No hay peor infierno que el de perder la libertad de crecer". Lalo de los Santos.

“Hay padres que enseñan a sus hijos que le deben todo a ellos, y hay quienes piensan que le deben todo a sus hijos, sus sufrimientos y alegrías son los suyos. Pero hay que ser digno de ser amado, ser padres no es suficiente”. Annick de Souzenelle

1/10/09

El sentido de la vida o una vida con sentido


“Hay quién obedece a sus propias reglas

porque se sabe en lo cierto;
quien cosecha un especial placer
en hacer algo bien; quien adivina
algo más que lo que sus ojos ven;
quien prefiere volar a comprar y comer.
Hay también quienes prefieren viajar
por lugares de encanto y aventura,
y de luminosa libertad.
Con todos ellos podré hacer
una sincera y duradera amistad”.

“Juan Salvador Gaviota”, Richard Bach


La vida puede tener tantos sentidos como las personas quieran darle, inclusive hay quienes afirman que la vida no tiene otro sentido que ella misma, o, simplemente, que es un misterio que no nos es dado comprender. Así, no hay una única respuesta, y todo depende de la perspectiva desde la cual se mira.

La conocida frase: “todo depende del cristal con que se mire”, encierra una increíble y profunda sabiduría, pues quienes trabajan con la magia de los cristales saben muy bien que a través de estos minerales se puede conectar con la sabiduría ancestral de la tierra y con conciencias muy elevadas, pudiendo equilibrar los aspectos materiales, mentales y espirituales de la vida, a través de los chacras, por ejemplo.

En todo caso, el sentido que le demos a nuestra vida siempre dependerá de nuestra perspectiva, de nuestra conciencia y sabiduría actual. En la medida en que consideremos nuestras experiencias personales, así hayan sido positivas o muy negativas, como oportunidades para aprender y crecer, vamos hacia un sentido espiritual.

No se puede ignorar la influencia del contexto familiar y del ambiente en que vivimos, en el mejor de los casos positivos y beneficiosos, y en otros casos muy negativas, con prejuicios, conceptos y presiones que determinan una herencia, que como una marca algunas personas llevan por el resto de sus días.

En una etapa introspectiva, y si sentimos la caída de nuestra forma de ver adquirida, si vemos la estrechez y limitación de los patrones y valores aprendidos, podemos experimentar la necesidad urgente, y a veces obsesiva, de encontrarle otro sentido a nuestra vida. Es aquí cuando sentimos que perdemos el rumbo y viajamos a la deriva.

Una vez escuché a una psicóloga decir: "cuando no le encuentres sentido a tu vida, busca en ocuparte de ayudar a otros", no sé si será una herramienta usual como terapia, pero me parece una muy buena idea.

Otro aspecto que contemplar es la carga kármica, el resultado de nuestras propias acciones del pasado y del presente. Creyendo o no en el funcionamiento del proceso de causa y efecto, según el principio oriental del karma, todo lo que pensamos, decimos y hacemos vuelve en algún momento y como forma de energía a nosotros, es una ley universal que rige el orden cósmico y moral.

Nos gusta pensar que, en cualquier momento podemos elegir libremente qué sentido queremos darle a nuestra vida, pero no vemos muy fácilmente que nuestra elección esta orientada por nuestros condicionamientos, el tan proclamado libre albedrío así no es más que una libertad condicionada.

A pesar de todo, lo bueno es que, si sabemos mirar un poco más lejos de nuestro ego, podemos ver innumerables ejemplos y comprobar que es posible incluso partiendo del peor  entorno familiar y/o personal, lograr sobreponerse y abrir y expandir la percepción y la conciencia, elevando la mirada por sobre hábitos y conceptos adquiridos.

Todos tenemos la capacidad individual de poder liberarnos de ataduras y condicionamientos, el grado en que lo logremos depende del compromiso que asumamos con nosotros mismos. Hasta el  karma se puede liquidar en esta vida, no será una tarea fácil, pero sabemos que se puede; después de todo en esta vida no hay nada que valga la pena y  sea fácil.

Así, el sentido de la vida no es siempre algo único y fijo a lo largo de nuestra existencia, va cambiando a medida que cambia nuestra perspectiva, nuestra percepción y nuestra comprensión, y este crecimiento, este cambio, va construyendo una vida con sentido.

Es un paso trascendente, que llega a movilizar nuestras estructuras y esquemas más rígidos y profundos, el dejar de ver todas las cosas en función de yo y mi o mio, el dejar de sentirnos víctimas de las circunstancias, de los demás, de nuestros padres, etc. De esta manera podemos comprender que la paz y el bienestar interior, que toda apertura de conciencia y crecimiento interior, no es algo beneficioso solamente para nosotros, sino que también afecta y beneficia a los demás, a nuestro entorno.

Llegando a este punto, podemos virar, como con un golpe de timón, el rumbo de nuestros intereses personales enfocados en el ego, dándole así un sentido más altruista, y compasivo a nuestra vida. En lugar de pensar solamente en qué puede darnos la vida, qué podemos obtener de ella, podemos considerar también qué podemos  ofrecerle nosotros a la vida.


15/9/09

Las palabras, el lenguaje y los símbolos


“Permite que las palabras desenvuelvan su luz a medida que vas leyendo“.



La Palabra de Dios se hizo hombre:

En el principio era la Palabra,
y la Palabra estaba ante Dios,
y la Palabra era Dios.
Ella estaba ante Dios en el principio.

Por Ella se hizo todo,
y nada llegó a ser sin Ella.
Lo que fue hecho tenía vida en Ella,
y para los hombres la vida era luz.
La luz brilla en las tinieblas,
y las tinieblas no la recibieron...

(Primeras estrofas del Evangelio de Juan)


El silencio y la palabra:

El silencio conlleva en si mismo el principio de la palabra, y la palabra es el silencio expresado, pero el silencio es infinitamente más que la palabra no expresada, es lo inexpresable.


Las letras y los números:

Se sirven para provocar el fenómeno de convertir las nociones del plano espiritual en imágenes equivalentes en el plano mental. Cada letra puede ser interpretada por un número, una figura y una forma, en la antigüedad el sacerdote, o mago del verbo, podía descifrar los tres elementos. La solución de cuestiones de orden doctrinal se realizaba antiguamente por el cálculo de letras y números.
Las letras se corresponden con las diversas partes del organismo humano y tienen una aplicación terapéutica.


El lenguaje de los pájaros:

Llamado lengua angélica, su imagen en el mundo humano es el lenguaje ritmado.

Sobre la ciencia del ritmo se basan todos los medios para entrar en comunicación con los estados superiores del ser. Los libros sagrados fueron escritos en lenguaje ritmado. La poesía en su origen tenía un carácter sagrado, era el lenguaje de los dioses. 

A través del vates o poeta, de inspiración profética, se transparentaba el Verbo Divino; algo muy distinto de la simple obra de arte o literaria. El arte como valor simbólico, sirve de soporte a la meditación, como reflejo y aplicación de los principios tradicionales o sagrados, que utilizaban los constructores en la Edad Media.

“Símbolos Fundamentales de la Ciencia Sagrada”, René Guenón.


El simbolismo:

Es la expresión formal de una doctrina, siempre sugiere más de lo que expresa, es menos limitado que el lenguaje usual, es el lenguaje metafísico por excelencia. Simboliza la idea como una representación sensible y analógica, natural al espíritu humano. La escritura en su origen fue ideo-gráfica, esencialmente simbólica. 

Los ritos tienen también un carácter simbólico, provienen de fuentes metafísicas, aún los ritos sociales. Los sacramentos, representan meta-físicamente, el principio de algunas vías de realización.

Los símbolos tienen una eficacia muy real, son el soporte para la influencia espiritual, son instrumentos de una regeneración psíquica inmediata o diferida, según la capacidad receptiva de cada uno.

La incapacidad de elevarse hasta la significación puramente intelectual del símbolo produce la idolatría, cuando su razón de ser y su eficacia desaparecen, el símbolo se transforma en superstición.

René Guenón


Definiciones de algunos términos y símbolos metafísicos:

ESCRITURA SAGRADA: “Toda escritura sagrada esta sellada con siete sellos. Se requieren siete interpretaciones completas para entender plenamente el significado de las revelaciones filosóficas antiguas”.

EL LABERINTO: Representa al ser que llega a encontrar su propio centro. El recorrido es la representación de la multiplicidad de los estados del ser. Sugiere protección.

LA CASA: Imagen del cosmos, un pequeño mundo cerrado y completo en si mismo.

LA ESPADA: Símbolo del verbo o la palabra, doble poder: creador y destructor.

EL DESIERTO: “Donde el sol traza los Nombres Divinos en letras de fuego en el cielo”. En el desierto toda la diversidad esta reducida al mínimo, los espejismos son lo ilusorio del mundo manifestado.

EL SENDERO: Seguir uno de los radios para pasar de la circunferencia o corriente de las formas al centro o invariable medio. Los radios de la circunferencia: las vías hacia Dios son tan numerosas como las almas de los hombres, pero la meta es una, hay un solo centro y una sola verdad.

RE-VELAR: Tiene un doble sentido, manifestar y velar la verdad una; como la palabra hace en cuanto al pensamiento que expresa.

INICIACIÓN: Transmisión regular de la influencia espiritual. El proceso iniciático reproduce en todas sus fases el proceso cosmogónico.

LOS MENSAJEROS DIVINOS: Son los ángeles. Dios hace de los vientos sus mensajeros: “Dios envía los vientos como buena nueva anunciación de Su misericordia” (Corán, Salmo XIV).

LA TETRAKTYS DE PITAGORAS: 1+2+3+4=10. La tetraktys contiene a todos los números, toda la manifestación esta involucrada en el cuaternario, o este constituye la base completa del desarrollo integral de aquella.

EL DELFÍN: Representa la idea de luz, el salvador de náufragos. El conductor de las almas bienaventuradas hacia las “islas afortunadas”. La Cabeza de Pez: era el tocado de los sacerdotes caldeos, hoy es la mitra de los obispos cristianos. El pez como símbolo de Cristo, IKTHYS: Jesús-Cristo, de Dios hijo, el Salvador.
El pez, en la India, es la primera manifestación de Vishnú, el punto de partida de la tradición primordial.

LA CAÍDA: El hombre se olvida del desarrollo de si mismo a otros niveles de conciencia y considera normal su estado de inconsciencia y su situación animal, es la esclavitud interior del hombre.

EL HERMANO: Aquel en quien Dios se hace barrera, la serpiente representa al primer hermano. El que rehúsa al hermano que él es, en su sombra y energía vital, se destruye. El hermano es aún el otro....y es la prueba (el infierno son siempre los otros). El que franquea la barrera y acepta al hermano, en él mismo y fuera de si mismo, encuentra la vida al otro lado de ella. Una vida que no encontrara barreras sería estéril.

EL HÍGADO: Es el receptor de la Gloria Divina. El hígado saturado de alimentos terrenos, físicos y psíquicos, produce malestar y pesadez. El ayuno lleva al vacío y la liberación. Colmarse de alimentos divinos es darle verdadera dimensión al alma.





23/8/09

Mensajes del alma



Además de los Maestros, hay en el mundo muchos mensajeros, qué, como ángeles, se complacen en ofrecernos mensajes para el alma: poetas, escritores, cantantes, pintores, amigos, etc.






LA AMISTAD
Muchos de mis amigos vinieron de las nubes,
con el sol y la lluvia como único equipaje.
Hicieron de la estación de la amistad sincera,
la más bella estación de las cuatro de la Tierra.
Tienen esa dulzura de los bellos paisajes
y la fidelidad de las aves de paso.
En su corazón hay grabada una infinita ternura,
pero a veces en sus ojos se refleja la tristeza.
Entonces vienen a calentar su corazón a mi casa,
y tú también vendrás.


Y podrás volver a lo profundo de las nubes,
y de nuevo sonreír a muchos otros rostros,
y dar a tú alrededor un poco de ternura,
cuando otro quiera ocultarte su tristeza.
Como no sabemos qué nos depara la vida,
quizá yo también deje de sentirme alguien.
Si me queda un amigo que realmente me comprenda,
olvidaré a la vez mis lágrimas y mi pena.
Entonces, quizás, iré a tu casa
a calentar mi corazón con tu leño.

Francoise Hardy



TANTAS BELLAS COSAS
Aunque tenga que soltar tu mano,
sin poder decirte hasta mañana,
nada podrá deshacer jamás
nuestros lazos,
aunque deba irme más lejos,
cruzar puentes, cambiar de tren.


El amor es más fuerte que la desazón,
el amor que hace latir nuestro corazón,
va a sublimar este dolor,
transformar el plomo en oro.
Tienes tantas cosas bellas
para vivir aún.


Verás al final del túnel
dibujarse un arco iris,
reflorecer las lilas;
tienes tantas cosas bellas
delante tuyo.


Aunque te vele desde otra orilla,
lo que hagas, lo que te pase,
yo estaré contigo como antes;
aunque salgas a la deriva,
el estado de gracia, las fuerzas vivas,
volverán más rápido que puedas creer.


En el espacio que une cielo y tierra,
se oculta el misterio más grande,
como la bruma vela la aurora,
hay tantas cosas bellas que tu ignoras,
la fe que vence las montañas,
el manantial blanco en tu alma,
piensa cuando te duermes,
el amor es más fuerte que la muerte.


Francoise Hardy




CONTRA VIENTOS Y MAREAS
Olvida las apariencias,
el silencio no es jamás inmóvil,
todo espera un sentido,
ten confianza, imagina
la presencia de las fuerzas,
continúa tu esfuerzo,
piensa en tu meta,
busca aún.


El mundo y tú
están sumisos a las leyes;
sueña, y alguna vez
antes que te lances, que dances,
que corras sobre el filo de tu vida,
que tus hermosas evidencias,
y tu violencia,
caigan en ruinas,
muchos duelos te esperan;
pero debes avanzar,
mirar sin engaños, la verdad,
sigue tu camino,
cueste lo que cueste,
contra vientos y mareas.


Si nadie escapa a esas tormentas
que al pasar barren, las señales,
que apagan la luz,
en la noche negra;
temprano o tarde
va a brillar una esperanza,
y surgirá tu victoria...


Ármate de paciencia,
el sufrimiento no es jamás inútil,
él se eleva en silencio,
teje los hilos invisibles
de otro nacimiento.
Mira el mar que se calma,
el sol sobre los árboles,
seca tus lágrimas,
ama la vida, permanece verdadero,
contra vientos y mareas.


Francoise Hardy & Eric Clapton.

14/7/09

El camino espiritual





“Nadie alcanzaría la verdadera espiritualidad sino tuviera antes un atisbo de ella en su alma. De ser cierta la creencia general que los hombres, así como son, no son espirituales, tampoco podrían llegar a serlo jamás, pues tal como el alquimista necesita un mínimo de oro para obtenerlo como por arte de magia en grandes cantidades, es indispensable tener ya un poco de espiritualidad, para, de ahí en mas, no conocer limites en el desarrollo de esta facultad” (Rudolf Steiner).










El camino espiritual no siempre empieza buscando algo o alguien exterior, algo que a uno le falta o que desearía ser, a veces empieza buscando un sentido a lo que ya se tiene, se hace y/o se es. Es frecuente que las cosas que se nos aparecen como más obvias a la percepción, terminen siendo no tan obvias. 

Por eso sería conveniente hablar de lo espiritual diciendo que es aquello de lo más esencial y elevado en el ser humano, aquello que está en el origen y es la causa de todas las cosas, eso que no se ve, no se percibe a primera vista, y que también, por otra parte, se manifiesta  plenamente en pensamiento, palabra y acción en esos seres que conocemos y llamamos Maestros.

No siempre parece ser el mismo idioma cuando se habla de espiritualidad y de religión, cuando los dogmas y/o las personas se cierran en la in-tolerancia. En tanto consideremos lo espiritual como lo esencial, lo más elevado del ser, todas las religiones son espirituales, pues todas tratan sobre lo esencial y la manera de elevar al ser humano.

En cambio, lo espiritual no es necesariamente siempre religioso, en el sentido de no seguir y/o reconocer una única doctrina verdadera, se trata de una percepción de Unidad por sobre todos los dogmas.

La palabra religión significa literalmente unir, re-ligar, alude a un credo en particular, o, en plural, al abanico cada vez más numeroso de formulas registradas. Así, y para su desarrollo, cada religión posee una estructura más o menos rígida que la sostiene: un dogma, una moral, y rituales, que a su vez la distingue de las demás, y que también a veces las separa, al igual que a sus respectivas comunidades.

Y si percibimos algo espiritual en una forma de ver y de experimentar la existencia, no por eso deberíamos etiquetarlo siempre como un dogma, una religión o creencia determinada.

Tener que esforzarse y trabajar toda la vida para fortalecer el ego y desarrollar el yo, y un día empezar a dejarlos de lado, produce inevitablemente, sobre-todo en una primera etapa, un sentimiento de angustia como el dolor de las lágrimas no lloradas, sentimiento que genera dudas y miedo al cambio, miedo a dejar conductas y hábitos aprendidos, lo que nos puede llevar a la negación de lo espiritual: "esto me resulta muy interesante y muy bueno, pero no es para mí", o "como teoría es muy buena, pero es impracticable". 

Por otro lado, cuando no le encontramos un sentido profundo a nuestra vida, o nos sentimos separados y vemos lo efímero de todas las cosas exteriores, podemos experimentar un sentimiento de infinita tristeza.

En esos momentos tiene que ser más fuerte el anhelo de elevar y abrir la conciencia, el amor, la compasión y la comprensión, que el deseo del ego de conformarse con la vida material de los sentidos, también hay que desplegar un cierto anhelo de libertad, de aventura, pues estas cosas deben ser vivenciadas y no solo comprendidas y/o compartidas intelectualmente. Así como hay placeres del cuerpo, también hay placeres del alma.

De cualquier manera y por no importa qué camino, hay que seguir siempre ciertas pautas de entrenamiento, como se sigue en definitiva en cualquier actividad que uno considere altamente beneficiosa, y sostener la confianza en un modo de ver y sentir, confianza que solo crecerá a medida que uno se interne cada vez más en el sendero. 

Puede ser muy enriquecedor, y también favorable para una apertura mental y una mayor comprensión, conocer, aprender y/o incorporar pautas seguidas en otros caminos que no sean el nuestro, por ejemplo: practicar la meditación de origen budista, o el yoga, en el cristianismo.

Seguir un camino espiritual, no significa alejarse del mundo, es más bien poder mirar con otros ojos, no es un camino de logros, de éxitos, es uno de soltar, de dejar ir. Si lo que vamos percibiendo por el camino elegido no nos produce paz y alegría interior, si no nos hace más tolerantes y comprensivos hacia los que no piensan como nosotros, si no aprendemos a escuchar sin pre-juzgar, si no nos estimula el amor y la compasión por todos los seres sintientes, no es verdadera sabiduría. 

Podemos encontrar arte y belleza en el camino, hay una exquisita poesía mística en algunos textos espirituales. Se puede llegar a ver la espiritualidad en todo, si lo espiritual esta en los ojos del que mira.

“Si tuviéramos una visión plena de la ver­dad, ya no buscaríamos a Dios, sino que seríamos uno con El, porque la verdad es Dios. Mientras no lo logremos, seremos imperfectos. Por consiguiente, la religión -tal como la concebimos- también tiene que ser imperfecta: está sujeta a evolución” (Mahatma Gandhi).

29/5/09

Enseñanzas esotéricas


La Doctrina Secreta:

La mayoría de los que se llaman cristianos ignoran que también en el cristianismo hay una Doctrina Secreta, conocida siempre de los místicos de dentro y fuera de la Iglesia, cuya llama mantuvieron y mantienen viva unas cuantas devotas almas escogidas para esta sagrada labor.

La doctrina secreta del cristianismo no tuvo su origen en Jesús, quien por su parte también fue iniciado en los Misterios que se enseñaban desde muchos siglos antes de su nacimiento.

Así dice San Agustín: “Lo que llamamos la religión cristiana existió entre los antiguos y nunca cesó de existir desde el principio de la raza humana hasta que Cristo tomó carne, cuando la verdadera religión ya existente se empezó a llamar Cristianismo”.

Cabe afirmar sencillamente que ya no se enseñan estas doctrinas en las Iglesias. ¿Cómo es esto? Porque el cristianismo ha olvidado gran parte de sus originarias enseñanzas y se satisface hoy con la parte restante, que es muy corta en relación a lo que primitivamente conoció. Se dirá que el cristianismo tiene todavía las mismas Escrituras. 

Es cierto; pero estas Escrituras enseñan algo que hoy esta olvidado. ¿Qué significan las constantes referencias a los Misterios del Reino de Dios, la frecuente declaración de Jesús a los discípulos de que solo a ellos les era dado conocerlos y que a los demás les había de hablar en parábolas? ¿Por qué emplea siempre Jesús los términos técnicamente peculiares de las enseñanzas esotéricas de la antigüedad? ¿Qué significa San Pablo al decir: “Hablamos sabiduría entre los perfectos”, palabra esta última aplicada a los que habían alcanzado cierto grado de Iniciación?

Repetidamente emplea San Pablo términos técnicos pues habla de la “sabiduría de Dios en misterio, la que Dios ordenó antes del principio del mundo y que no conocen los príncipes de este mundo”. Desde luego que no hubiera sido verdadera esta afirmación de Pablo si únicamente se refiriera a las exotéricas enseñanzas del cristianismo, que abiertamente se predicaban a todas las gentes. Los inmediatos sucesores de Pablo, los Padres de la Iglesia, sabían perfectamente bien lo que significaban las afirmaciones de su predecesor, pues todos ellos usan precisamente la misma fraseología. San Clemente Alejandrino, uno de los primeros y más insignes, nos dice que “no es licito revelar a los prófanos, los Misterios del Verbo”.

La iglesia solo procura hoy que las gentes sean piadosas y señala la santidad como la meta y corona de su propósito. Pero en los primeros tiempos requería mucho más, pues cuando un hombre alcanzaba la santidad, es decir cuando ya era perfecto, entonces lo consideraba capaz de recibir las enseñanzas que hoy día no puede dar porque ha olvidado el antiguo Conocimiento. La Iglesia Primitiva señalaba tres etapas disciplinarias: purificación, perfección e iluminación. Hoy día se satisface con la purificación y a lo sumo con la perfección o santidad porque no tiene iluminación que dar.

Decía San Clemente de Alejandría: “La pureza es tan solo un estado negativo, principalmente valioso como requisito de la intuición". El purificado por el bautismo e iniciado después en los Misterios menores, en los que adquirió los hábitos de reflexión y dominio propio, está ya maduro para los Misterios Mayores, para la Gnósis o científico conocimiento de Dios. El conocimiento es algo más que la fe. La fe es el sumario conocimiento de apremiantes verdades, a propósito para las gentes ocupadas en los negocios del mundo; pero el conocimiento es la fe científica


El Espíritu Santo:

Para la generalidad de los cristianos, la naturaleza del Espíritu Santo, la tercera Persona de la Trinidad es muy oscura y no la comprenden. El cuidado examen de los escritos cristianos ortodoxos demuestra que la Iglesia estámuy ofuscada en este punto que debiera ser importantísimo para los sacerdotes y congregaciones. Si le preguntamos a un clérigo de vulgar entendimiento cual es la naturaleza del Espíritu Santo, veremos cuan vagos, contradictorios y deficientes son los conceptos que mantiene. 

Si consultamos las enciclopedias y libros de referencia, notaremos que muy poco saben y dicen sobre tan importante asunto. Únicamente lo esclarecen las enseñanzas del cristianismo místico, pues son explícitas sobre este punto atestado de dificultades e incomprensión por parte de los teólogos ortodoxos.

Las enseñanzas del cristianismo místico acerca del Espíritu Santo pueden compendiarse en la siguiente declaración: El Espíritu Santo es lo Absoluto en su fase de manifestación, comparado con su fase de in-manifestación. Es el Ser manifiesto comparado con el in-manifiesto. El Dios creado en comparación del in-creado Dios. Es Dios operante como activo Principio, en comparación con Dios el Absoluto Ser. Para bien comprenderla es necesario tener en cuenta que podemos considerar al Absoluto en dos fases; no como dos personas, entidades o seres, sino como dos fases. No hay más que un Ser, ni puede haber más que un Ser Absoluto; pero podemos considerarlo en dos fases o aspectos: el in-manifestado y el manifestado. 

El in-manifestado es el Único en su fase de Absoluto Ser, indiferenciado, in-manifestado, increado, sin atributos ni cualidades ni naturalezas. La mente humana es incapaz de concebir el Ser In manifestado como una cosa, como algo, porque si así lo concibiéramos dejaría de ser el Absoluto e In-manifestado. Siempre que pensáramos en algo sería este algo una manifestación en la objetiva existencia.

Materialmente hablando Dios es incognoscible, pero en alto sentido puede conocer y probar su existencia el espíritu humano por el ejercicio de las facultades superiores de la mente y el corazón. El Ser in-manifestado es el Único en su propia existencia y esencia. Si todo el mundo de objetiva vida manifestada, aún en sus formas superiores, quedara substraído de la manifestación ¿Qué restaría? Únicamente el Ser In-manifestado. Únicamente Dios Padre en cuyo ser quedaría absorbido el universo. Nada habría fuera de él. Sería El por sí mismo, el Único en su fase de in-manifestación.

Desde luego que esta idea puede parecer demasiado abstrusa a primera lectura, como si fuese la afirmación de un Ser que es el No-Ser; pero conviene no apresurarse y esperar a que la mente se asimile el concepto, pues entonces reconocerá cada cual que dicho concepto se armoniza con la correspondiente verdad oculta en lo íntimo de su conciencia, y comprenderá a Dios Padre comparado con Dios Espíritu Santo, quien, según dijimos es el Absoluto en su fase de Ser Manifestado. Es Dios manifiesto en toda vida objetiva y en todos los fenómenos del universo.

Hay un Espíritu de Vida inmanente y manifiesto en todas las formas de vida, en el universo todo esta vivo, hasta los minerales y los átomos componentes de la materia.

La verdad referente a la inmanencia de Dios subyace en las místicas enseñanzas de todos los pueblos, razas y épocas. Sea cual sea el nombre que se les dé y la religión que las contenga, enseñan que Dios está inmanente en todas las formas de materia y en todas las modalidades de vida y energía. Esta verdad constituye la Doctrina Secreta o esotérica de toda filosofía, credo y religión.

"Cristianismo Místico"; Yogi Ramacharaka.


7/5/09

El budismo, el sexo y la vida espiritual.


Una entrevista con Sangharákshita

Introducción:
A finales de los años sesenta, después de 20 años viviendo como un monje budista célibe en la India, Sangharákshita regresó a Londres – su ciudad natal – para descubrirla en plena época del "amor libre". Decidió quedarse a enseñar el budismo y fundó una nueva orden budista – la Orden Budista Occidental-.
En este ambiente se mantuvo siempre fiel a los principios básicos del budismo pero se permitió cuestionar las formas tradicionales de practicar. Quería encontrar formas más relevantes de comunicar las verdades perennes de las enseñanzas del Buda.

Sus planteamientos acerca del sexo a veces resultaron polémicos... para algunos budistas tradicionales les resultaron demasiados liberales mientras para algunos jóvenes de la época les parecieron muy disciplinados. No obstante, sus puntos de vista son siempre refrescantes y nos desafían a reflexionar y cuestionar si nuestras ideas acerca del sexo son simplemente costumbres sociales o realmente son principios éticos.

Esta entrevista con Nagabodhi – el editor de la revista Golden Drum – fue publicado en 1988, unos 20 años después de que Sangharákshita comenzó a enseñar en occidente. Habla muy sinceramente acerca de la sexualidad y sus experiencias de enseñar durante aquello tiempo.
Dado que la revista iba dirigida a personas que ya tenía experiencia previa de sus enseñanzas y que han pasado muchos años desde entonces, hemos incluido unas notas de página para personas que no están familiarizadas con el pensamiento de Sangharákshita.

Entrevista:
Nagabodhi: Los Cinco Preceptos son el "mínimo común " de la observancia ética entre los budistas de todo el mundo. El tercero de éstos, "Kamesu micchachara veramani sikkhapadam samadiyami", dice: "Me comprometo a adiestrarme en él principio de refrenar conductas sexuales incorrectas". ¿Cuál es el significado esencial de este precepto?

Sangharákshita: El precepto tiene un aspecto social y un aspecto personal. El primer aspecto conlleva evitar comportamientos sexuales socialmente inaceptables y el segundo excluye la participación en cualquier tipo de comportamientos sexuales que, de algún modo, entorpezcan gravemente el progreso en la ética y la vida espiritual.

2. Habitualmente, en el budismo oriental, el significado de este principio se interpreta sencillamente como la prohibición de cometer actos de violación, abducción y adulterio.

Es un enfoque muy estrecho. Lo primero que se me ocurre es el caso de Bangkok, que es casi la capital mundial de la prostitución. Sin embargo, Tailandia es un país budista, donde las prostitutas también son, presumiblemente, buenas budistas. Aquellas que se prostituyen - suponiendo que no sean mujeres casadas que lo hacen para mejorar el presupuesto doméstico - no están realizando actos de violación, adulterio ni abducción y, por tanto, de acuerdo con la interpretación común de los budistas, no estarían faltando al tercer precepto... Pero resulta difícil de aceptar que se pueda practicar la prostitución y estar llevando una vida ética desde una perspectiva budista!

3. ¿Y por qué se interpreta tan restrictivamente?

Creo que los budistas orientales, incluyendo los de algunas partes de la India, no analizan en absoluto su comportamiento sexual. Al menos hasta ahora. Para ellos es más una cuestión de seguir los usos y costumbres que de analizar, por sí mismos, cuán éticos pudieran ser. Hay que reconocer que en la mayoría de los casos las tradiciones suelen ir bien encaminadas pero no de una forma demasiado inteligente: la gente no examina su comportamiento sexual ni otros aspectos de su vida y, cuando lo hace, es sólo en función de la aprobación o reprobación social. Y, naturalmente, el grupo [1] interpreta el precepto en un sentido más bien social.

En general, en el Oriente budista, la gente no se preocupa mucho de qué ocurre en la vida privada entre adultos consintientes, siempre y cuando no se cometa actos de adulterio, violación ni nada así... Es cierto que en el budismo no preocupa el detalle de los comportamientos sexuales como ocurre aquí en Occidente - como motivo para chismorreos y morbo - y quizás ni siquiera como escrutinio moral.
Tal vez se pueda añadir que tampoco se espera que un laico realmente lleve una vida espiritual; mientras que sí se espera esto de los monjes y monjas. Para ellos existe el Vinaya, [2] que examina dicho precepto en mucho detalle, probablemente para dejar bien clara la exclusión de cualquier forma de conducta sexual.

4. ¿Hasta qué punto las reglas del Vinaya pueden tomarse como las mismas palabras del Buda o como una detallada elaboración de los puntos de vista del Buda con respecto al sexo?

No estoy convencido de todo si es que se trata o no, en un sentido literal, del Buda-vachana (la palabra del Buda). Pero no cabe duda de que el Vinaya ofrece una fidedigna expresión de las ideas del Buda al respecto. Tiene un tono demasiado legalista y me cuesta creer que el Buda enfocase nada desde un punto de vista puramente legalista; no obstante, creo el Vinaya sí da expresión de una actitud o principio que era propia de él.

Sin duda el Buda esperaba el celibato de sus discípulos monjes, de aquellos que habían dado el paso de dejar atrás a sus esposas y a sus familias. Y parece que no sólo estaba claro para el Buda sino para muchos otras personas de su época. Quien había dejado atrás su vida doméstica para seguir una vida de mendicante, probablemente lo hacía porque deseaba liberarse de las ataduras implícitas en ese tipo de situaciones. Sin reparar en el aspecto personal de la ética sexual -incluso no teniendo en cuenta su efecto en la mente- es todavía necesario evitar las relaciones sexuales si se desea estar libre de las ataduras mundanas -en un sentido doméstico-. Todo aquel que participa en actividades sexuales tiende a establecer una relación de pareja, a traer niños al mundo... y a regresar al punto de partida.

Desde esta perspectiva, la abstención sexual podría considerarse concomitante con un cierto estilo de vida más que con la vida espiritual en sí.
El Buda no quiso decir que aquel que no abandonase toda la práctica sexual no podía progresar en su vida espiritual, ni que no se pudiese progresar espiritualmente si no se era monje. Tenía discípulos laicos - que habían Entrado en el Flujo [3] - y que al parecer no habían abandonado el sexo. Pero si se quería llevar un estilo de vida monástico, hubiera resultado contradictorio mantener relaciones sexuales en una sociedad en la que no existían anticonceptivos.

5. ¿Cuando estabas en Oriente viviendo como monje, que papel jugaba la castidad en tu práctica personal?

No estoy seguro de que jugase un papel muy importante. Sabía que se esperaba que fuese célibe y lo fui: lo acepté como parte de mi compromiso, como parte de la vida espiritual; pero mirando atrás, creo que no consideraba la castidad como una "práctica en sí" o como algo sobre lo que tenía que trabajar.
Fui casto muchos años con el cuerpo y creo que con la palabra [4] - la falta de castidad verbal me ha desagradado desde pequeño - pero no me esforcé demasiado por eliminar pensamientos de tipo sexual. Estaba más preocupado por erradicar la falta de atención consciente [5], y más inquieto por las ideas y pensamientos violentos que por los sexuales, los cuales tendía a considerar más "naturales".

Incluso en el ejército, estos sentimientos, aunque intensos, tendían a quedarse en un segundo plano. Mi encuentro con Oriente me tenía fascinado. Leía cualquier libro budista que pudiese conseguir, escribía... Fue una época interesantísima para mí y los pensamientos sexuales no tenían importancia en mi vida. Sólo cuando mi sed por cosas como el Dharma, la literatura, la poesía y la filosofía se había satisfecho un poco, empezaba a pensar en el sexo, a finales de mi estancia en la India.

6. Conforme a tu experiencia del actual Theravada, [6] ¿practican los monjes la castidad de forma impecable?

Algunos monjes me contaban cosas con respecto a este aspecto; y por lo que decían me daba la impresión de que, la mayoría de ellos habían cometido de vez en cuando pequeños deslices contra el celibato. También me enteré de algunos monjes que tenían esposa e hijos – aunque se esforzaban por mantener esto en secreto - no obstante, seguían llevando el hábito amarillo y esperaban ser tratados como monjes.
Las pequeños deslices eran generalmente ignorados; como si fuese mucho esperar de un ser humano que se mantenga totalmente célibe, en cuerpo, incluso siendo monje. Entre ellos tuvieron una actitud bastante condescendiente; téngase en cuenta que muchos de ellos fueron monjes por motivos puramente sociales: por deseo de sus padres, por recibir una buena educación o por tener una seguridad económica... Por lo que no suponía un gran conflicto la falta contra el precepto con respecto a sus aspiraciones espirituales. Sólo estaban preocupados por qué ocurriría si los laicos se enterasen de la verdad.

7. A pesar de ello, en muchos países budistas, el sexo es el " gran divisor", el principal rasgo diferencial entre la vida de un monje y la vida de un laico - el monje es casto y el laico no. ¿Es certera esta observación?

Es cierta si se contempla en los países theravada y mahayana donde existen monjes célibes; pero no lo es para Japón - donde desde hace cientos de años desapareció el celibato monástico - ni para algunas tradiciones tibetanas, las cuales no promueven la vida monástica y, en consecuencia, tampoco el celibato.
En el mundo theravada los laicos y los monjes parecen tener muy poco en común, parece que ni siquiera siguen el mismo sendero espiritual. En el Mahayana, [7] se enfatiza principalmente el Ideal del Bodhisattva y, por lo tanto, en el desarrollo del Bodhichitta - o Aspiración a la Iluminación.
En los primeros tiempos del Mahayana existía una profunda convicción de que la enseñanza del Buda consistía, esencialmente, en un sólo sendero para todos. No sólo en el sentido de la enseñanza de un único yana, en vez de tres; sino también como un único camino espiritual a seguir, con independencia del estilo de vida. El Bodhichitta puede desarrollarse tanto en el laico como en el monje; lo realmente importante es seguir el camino de los Paramitás (Perfecciones) y convertirse en Bodhisattva. El celibato o no-celibato, pasa así a ser un tema de menor relevancia: no hay que ser monje ni laico para desarrollar nuestra espiritualidad. En términos de Los Amigos de la Orden Budista Occidental (AOBO), el compromiso es primario, mientras que el estilo de vida secundario.

Un desarrollo posterior fue el del Vajrayana. [8] Ha habido grandes maestros quienes no han sido monjes -incluso en la India-. Chandragomin - que compuso el "Himno a Tara" - era laico. Vimalakirti [9] era un Bodhisattva que aparece como laico. Marpa, que es también otro ejemplo famoso - aunque su más celebrado discípulo, Milarepa, [10] llevó una vida en extremo asceta y sin duda célibe. En cierto modo, fueron ellos quienes prepararon el terreno para los "matrimonios de lamas" de la rama Vajrayana.

8. ¿Crees que el Theravada pone demasiado énfasis en la castidad de la vida de los monjes?

Creo que es difícil prestarle excesiva importancia a la castidad. Sin embargo, sí es posible dar demasiada importancia a simplemente ser un monje, en la cual la castidad ocupa un lugar preponderante. Se puede decir que el Theravada se preocupa demasiado por el monasticismo; pone un énfasis en la castidad como aspecto inherente al monasticismo y, por tanto, enfatizan demasiado la castidad del "cuerpo": la castidad en su sentido puramente formal.

No se trata de considerar al casto como cordero, y a los demás como cabras, por usar esa metáfora. No es posible pensar que la castidad y la no-castidad son un caso de blanco o negro - como si uno fuese o uno u otro. Es más bien una cuestión de grados. En primer lugar podemos decir que existe la castidad del cuerpo, la castidad del habla y la castidad de la mente.

No podemos dividir a los budistas en castos y no castos. Tampoco en castos de cuerpo y no-castos de cuerpo. Realmente no podemos asociar la castidad con el monje y la no-castidad con el laico. Prefiero considerar que existen infinitos grados; y que cada persona practica en cierto grado tanto la castidad como la no castidad.

9. Creo que el Buda dijo una vez: "si hubiese otra pasión humana tan poderosa como el deseo sexual, no habría esperanzas de Iluminación para los seres humanos" ¿Qué crees que quiso dar a entender?

Se podría argüir que quizás sólo intentaba resaltar cuán poderosa es la pasión sexual y que, por ello, debían cuidarse de ella sus discípulos. Pero yo lo interpreto literalmente.
El impulso sexual es muy poderoso. Desde un punto de vista general, es el que permite la perpetuación de la especie. Podría considerarse la mayor artimaña de la naturaleza. Si no existiese el impulso sexual y si se nos plantease, en términos racionales, efectuar lo que el impulso sexual nos lleva a realizar instintivamente, la mayoría no lo haría. Sin el deseo, sin el impulso sexual ¿se querría realmente traer niños al mundo, alimentarlos, educarlos...? ¡Habría que ser demasiado altruista para hacer esto por motivos puramente racionales!

También el sexo puede tener un efecto muy destructivo. Puede ser fuente de intensas ataduras y sentimientos de posesividad, de celos, de odios y de desesperación. Puede abrumar a las personas hasta tal punto que les resulta imposible seguir una vida espiritual, o pensar siquiera en términos del desarrollo superior del ser humano.

Supongo que desde la perspectiva del Buda el deseo sexual es una forma de avidez. La avidez es -por supuesto- un estado mental torpe [11] y los estados mentales torpes no nos permiten avanzar hacia la Iluminación. Para el budismo - sobre todo en el caso del budismo temprano y del Theravada - el deseo sexual es axiomáticamente torpe. Dudo mucho que cualquiera de éstos acepte que sea posible participar en cualquier tipo de actividad sexual sin que, por lo menos en cierto grado, dicha actividad sea la expresión de algún estado mental torpe.

10. ¿En cualquier circunstancia o condición?

Podría decirse que sí. El énfasis del budismo con respecto al hecho de que el acto sexual es - o puede ser - un obstáculo en la vida espiritual, es virtualmente única. Las religiones teístas tienden a creer que Dios creó todo: el mundo, los seres humanos, sus cuerpos - incluidos los órganos reproductores-; por tanto, en cierta manera, apoya el sexo: lo respalda. Y en algunas religiones incluso lo bendice. La posición del cristianismo es más bien ambigua, ya que la Caída del Hombre y el Pecado Original complican las cosas.
Sin embargo, en el budismo no hay un Dios creador que es responsable por sexo... ¿Quién es entonces el responsable del sexo? Para el budismo es uno mismo. Son los propios deseos del "pasado" - en el sentido de existencias previas - los que nos han conducido a la vida actual dentro de materiales burdos: el cuerpo, y a través de sus órganos sexuales puede dar expresión a esos deseos, los cuales acarreamos de las existencias pasadas.

La gente no es consciente de cuán poderosa es esta fuerza. Se experimenta su poder cuando uno intenta oponerse a ella. Lo habitual es dar rienda suelta a las conductas sexuales; entonces no llega a experimentarse su fuerza - excepto cuando surgen obstáculos presentando cierta forma de oposición familiar o algo así-.

Por tanto, dado que el budismo contempla el deseo sexual - al igual que otros deseos - como algo que nos ata a la Rueda de la Vida y que nos ocasiona renacer una y otra vez. Nos enseña que si en verdad no deseamos renacer, si realmente queremos seguir el sendero espiritual y alcanzar el Nirvana, entonces es necesario evitar el sexo. Y no sólo en el sentido de la abstención de actividad sexual, sino también con objeto de superar los deseos y las ataduras que encuentran expresión a través de la actividad sexual.

11. Has estado empleando los términos "deseo" y "avidez". "Avidez" tiene una connotación neurótica [12] mientras "deseo" se emplea en el sentido de una sana apetencia. ¿Debe acaso contemplarse siempre el deseo sexual como apego neurótico?

El budismo tradicional, especialmente el Theravada, tiende a sostener que incluso una sana apetencia sexual es el reflejo de un estado mental torpe.
Según los principios budistas se puede estar Iluminado y, a la vez, disfrutar de los alimentos sin que esto suponga un deseo neurótico. Pero dudo que este principio pueda extenderse a la experiencia sexual. Los budistas pueden reconocer que, incluso estando iluminados, se necesita comer; pero no que un iluminado necesite implicarse en una relación sexual ni procrear.

Además, debemos recordar que la apetencia sexual siempre implica a otra persona. Cuando se establece una relación personal, emocional o física, con otra persona en el contexto de una relación sexual, habitualmente se producen todo tipo de proyecciones psicológicas que, a veces, desembocan en situaciones muy complicadas e incluso negativas - cosa que no ocurre, pongamos por caso, con la comida o con el sueño-. Incluso la llamada "sana apetencia" por el sexo, si satisface conduce rápidamente al apego; y éste al surgimiento de sentimientos de posesividad intensos, de celos, de odio. Se podría argumentar que quizás para algunos sea posible disfrutar del sexo sin caer en ese tipo de actitudes; pero aún así es muy probable que en la mente de la persona hubiera una carencia de emoción positiva y que estuvieran presentes estados mentales torpes, no tanto de deseo neurótico como de explotación e indiferencia.

12. Volviendo un momento a los Cinco Preceptos... En una ocasión escribiste una "versión tántrica" [13] de ellos, en la que el tercero decía "No malgastar la energía". ¿Podrías explicarnos esto?

El tercer precepto es una forma importante de la disciplina ética. Me he dado cuenta de que la mayoría de los jóvenes occidentales no aceptan bien la idea de la disciplina, lo cual dificultaba comunicar la importancia del precepto en términos disciplinarios.

Así pues, a lo que me refería por medio de esta formulación tántrica era a que la energía sexual es un paradigma de la energía en general. No creo que se trate de una energía sexual específica, especial e independiente. El organismo psicofísico es, en sí mismo, una expresión de energía, y la actividad sexual es sencillamente una de las formas en que se manifiesta. Es obvia la importancia de no dilapidar la energía; por tanto, si se sostiene que la energía sexual es una forma de energía, obviamente concluiremos que ésta no debe ser derrochada.

13. Algunos dicen que la actividad sexual - y en particular el orgasmo - confiere energía, y rechazan la idea de que la agote... ¿Tienes algún comentario?

No estoy muy de acuerdo con la idea de que el sexo realmente pueda proporcionar energía a la gente. Durante el orgasmo hay una expedición de energía. Uno gasta energía que puede dar una sensación de estar "rebosante" -como al pegar un raquetazo
.
Cuando la gente afirma que el sexo y el orgasmo realmente te proporciona energía, está refiriéndose a algo muy distinto. Creo que, especialmente en el caso de los hombres, cuando éstos experimentan un orgasmo, experimentan una especie de sensación de logro, de haber llegado a la meta, de haber realizado algo que consideran valioso. Su ego se siente un poco inflado y acrecentado, interpretando esto como un acceso de energía. Y no es éste, en absoluto, un estado sano ni positivo.

Con frecuencia, cuando se ha experimentado un orgasmo se desemboca en un estado que podría llamarse de "enervación". Al realizar el esfuerzo que supone alcanzar el orgasmo, la tendencia natural sencillamente es de descansar. Si se quiere meditar, superar los obstáculos, concentrarse y entrar en dhyana, [14] es necesario efectuar un gran esfuerzo; y tras un orgasmo, no está uno para tales esfuerzos. Hay quienes no sientan ganas de realizar ningún esfuerzo -especialmente de tipo mental- hasta varias horas después, mientras que hay otros que necesitan varios días antes de ser capaces de conseguir integrar su energía mental. No se trata de que estén físicamente agotados o mentalmente exhaustos; lo que han perdido es cierta agudeza, no sólo en el ámbito de la meditación sino además en otras áreas. Hay que otorgar a la energía -especialmente a la energía mental- un poco de tiempo para permitir que ésta se regenere y pueda volver a expresarse.

14. Habrás oído que se dice que en el momento del orgasmo se experimenta la disolución del ego y la fusión con la pareja...

Parece haber una confusión aquí entre sucumbir y trascender el ego. El ego se pierde en el sueño profundo; tampoco se es consciente en otras muchas situaciones; no porque se haya sido trascendido el ego sino porque, temporalmente, se ha regresado a un estado inferior de ego o de conciencia.

Y lo de "unión" es un disparate... ¡A menudo la gente que experimenta este tipo de unión durante el orgasmo cinco minutos después está discutiendo y peleándose!... ¿Dónde está la unión? ¿qué se ha conseguido? Si se lograse una verdadera unión en un sentido espiritual - y no en la línea de mutua enajenación - las actitudes hacia la otra persona podrían transformarse totalmente... Las personas se volverían positivas afectuosas, cuidadosas... Cosa que raramente ocurre en la mayoría de las relaciones de pareja.

15. Pese a ello, el sexo suele considerarse una ruta vital -la ruta vital- que conduce a la plenitud y a la satisfacción emocional...

Me pregunto si la gente consigue alcanzar satisfacción emocional y plenitud con del sexo. El sexo proporciona algo de satisfacción y plenitud, pero con un período de vida muy efímero.
La satisfacción emocional y la plenitud son algo muy importante. Desde una perspectiva filosófica, el budismo considera que las dificultades humanas se producen al buscar la absoluta felicidad en algo que es incapaz de proporcionar absoluta felicidad. Busca la permanencia en algo que es incapaz de proporcionarle permanencia; busca lo real entre lo irreal. No hay cosa finita que pueda proporcionar infinita e ilimitada satisfacción y plenitud -emocional o de otro tipo-; y eso es lo que, con frecuencia, suele buscarse en el sexo. El sexo puede proporcionar a la gente una cierta dosis de satisfacción y de plenitud; pero no puede proporcionarle satisfacción y plenitud al nivel de sus expectativas o esperanzas.

16. Pero la gente busca el sexo para gozar, al menos, de una cierta intimidad emocional...

Bueno, sí, hay cierta intimidad física en el sexo. Si se tratara de intimidad emocional sería otra cuestión. No hay duda sobre la cantidad de malentendidos y equívocos que se producen entre personas implicadas en una relación sexual. Con frecuencia cuando ésta termina ocurre de una forma más bien desafortunada y emocionalmente negativa. Las dos personas se separan, albergando quizás sentimientos muy negativos hacia cada cual. Y puede que la llamada intimidad jamás hubiese existido.

17. Cuando alguien dice que su pareja es su mejor amigo o amiga, ¿crees que se está engañando?

La amistad y el enamoramiento sexual son dos cosas muy diferentes. La pasión sexual puede surgir y alcanzar su consumación física muy, muy de prisa. La amistad, en cambio, es como una planta cuyo crecimiento es mucho más lento: necesita bastante más tiempo para desarrollarse. Se llega a ser amigo de otros cuando realmente se les llega a conocer; cuando se desarrolla confianza hacia ellos; cuando se llega a sentir que realmente ellos nos conocen y nos comprenden. Y todo eso es completamente distinto al proceso del enamoramiento sexual.

Al decaer la pasión puede que, sí las dos personas son bastante sanas y tienen cosas en común -incluido el deseo de formar una familia, o ciertos ideales religiosos y espirituales-, podrían desarrollar, a la larga, una amistad, especialmente al envejecer. Pese a ello, una relación sexual es algo muy distinto a la amistad. Si alguien me dice que su esposa es su mejor amiga, que su novia es su mejor amiga, que su novio es su mejor amigo, o que su esposo es su mejor amigo; no puedo evitar sentir que se está empleando el término "amistad" de una forma muy distinta a como yo lo hago.

18. Me parece que dijiste una vez que lo peor que se le puede hacer a las personas es enamorarse de ellas... ¿Podrías explicar que querías decir?

Enamorarse supone proyectarse psicológicamente, o ver en la otra persona cualidades y aspectos que son en realidad cualidades y aspectos de uno mismo, pero de los que no somos conscientes. Eso supone no estar viendo a la persona como realmente es. En cierto modo, no se le trata como a un ser humano, sino como si fuera un objeto o una cosa. Quizás ambas personas se traten mutuamente de ese modo y, puede ser que así estén satisfaciendo ciertos apetitos; pero no están, en modo alguno, desarrollándose como seres humanos y, menos todavía, desarrollándose espiritualmente.

19. Probablemente hayas invertido mucho tiempo, durante años, discutiendo estos aspectos de la vida de tus discípulos...

En los comienzos del AOBO, cuando la gente tendía a contarme a mí, más que a miembros de la Orden, sus asuntos cotidianas, aproximadamente la tercera parte de mi conversación giraba alrededor del tema del sexo, y especialmente de las relaciones sexuales que se habían roto o que habían ido mal.

20. ¿Descubriste que los hombres y las mujeres tienen problemas y preocupaciones diferentes en este sentido?

No es fácil generalizar, pero parece que resulta más importante para las mujeres establecer una "relación sexual de pareja". En cambio para el hombre es más una cuestión de cómo obtener satisfacción sexual, no necesariamente con una ni con la misma mujer.

En la mujer el deseo sexual está muy ligado al deseo de tener hijos. En el fondo tiene un deseo de maternidad y, por tanto, hay un deseo de que alguien la ayude y la cuide mientras tiene un hijo. No ocurre lo mismo en el hombre quien debe cuidarse de no adoptar una actitud auto-complaciente y puramente explotadora con respecto al sexo. Los hombres pueden desear hijos, pero raramente con el apasionamiento con que generalmente lo hacen las mujeres.

A través de los años he ido llegando a la conclusión de que la razón por la que las relaciones sexuales a menudo son tan complicadas, y a veces hasta desastrosas, es porque la gente las magnifica demasiado. Se tiende a construir toda una vida sobre ellas, sin que se dé lugar a que existan otras relaciones interpersonales serias... Ni con los padres, ni siquiera con amigos.

21. ¿Se trato de un síndrome occidental o has tenido que tratar problemas similares en la India?

No recuerdo haberlos tenido. En parte porque la gente - en caso de tener problemas relacionados con el sexo - tal vez consideraba inapropiado contármelos a mí, un monje célibe. Pero creo que es también porque la gente -la no occidentalizada- no tiene este tipo de problemas, dado que vive en familias extendidas, donde hay una buena red de relaciones, es decir, cuenta ya con una serie importante de relaciones en su vida.

22. ¿Podría eso ser una buena lección para nosotros?

En AOBO a veces lo expresamos utilizando el modelo del "mándala'' "o círculo mágico". El mándala es la totalidad de la propia vida y lo que hay dentro de éste representa lo que la compone. El mándala tiene un centro, que sería - en el mándala de la propia vida - lo que ocupa ese punto central: el interés, actividad, idea o ideal en torno al cual se organiza toda nuestra vida. Luego se incluyen las demás actividades e intereses, situando más cerca del centro aquellas que tienen mayor relevancia para nosotros, y más cerca de la periferia las que son de menor importancia.

Creo que en la mayoría de los casos el sexo tendría su legítimo lugar por la periferia del mándala personal. Realmente no debería estar colocado en el centro: ahí debe situarse al Buda, quien representa el ideal de la Iluminación. Es posible para un ser humano desarrollarse espiritualmente mientras está todavía realizando cierta actividad sexual. Pero sabiendo que no debe prestársele demasiada importancia, asegurándonos de que nuestras emociones no están ampliamente involucradas en la actividad y, especialmente, que se cuenta con un fuerte ideal espiritual asentado en el centro de nuestro mándala.

Obviamente, debemos tener mucho cuidado de no dejarnos atrapar por la racionalización - debido a la cual con frecuencia me resisto a admitir que el sexo tenga (¡en absoluto!) un lugar en el mándala. He oído a muchos hombres y a muchas mujeres decir que ellos no estaban seriamente enganchados a su relación sexual, pero luego han quedado totalmente desmoralizados al ser abandonados por su pareja.

23. ¿Y cómo puede alguien saber si está demasiado involucrado en su relación de pareja?

Se le podría preguntar a sus amigos espirituales. Es muy difícil reconocerlo uno mismo. Por supuesto, si deseas estar el mayor tiempo posible con tu pareja, es probable que la hayas situado en el centro de tu mándala. También puede uno darse cuenta de que cuando se tiene pareja y se está demasiado involucrado con ésta, se tiende, en cierta forma, a mantenerse en contacto con ella, refiriéndose a ésta en la menor ocasión posible, simplemente para confortarse con la idea de que todavía está allí... Es posible observar esto con frecuencia entre la gente que sostiene una relación de pareja. Esto muestra una ligazón y una dependencia emocional muy profundas, que no son en absoluto deseables. Por tanto, si se quiere estar seguro de que la relación sexual está realmente hacia la periferia del mándala, hay que tener cuidado de no invertir mucho tiempo con la persona con la que se mantiene la relación y estar seguro de que se tiene fuertes amistades con otras personas.

24. ¿Sería la fidelidad un factor importante en una relación "exitosa"?

La fidelidad supone ser fiel durante un período largo de tiempo, especialmente en ausencia del amigo o la pareja. No sólo con relación al tiempo, sino que también incluye al espacio. Supone la capacidad para comportarse en ausencia del amigo o la pareja como si, de hecho, estuviese presente. Y sólo es posible comportarse como si estuviese presente si se tiene un fuerte sentimiento de su existencia cuando no está físicamente con nosotros.

Para que eso sea posible, se le debe tener en consideración más a un nivel "mental" -en términos budistas- que en uno físico. Se debe ser menos susceptible a cada estimulación pasajera, dar menos importancia a la experiencia de los sentidos, y vivir menos el instante de un modo olvidadizo. La fidelidad es una cualidad muy propia del ser humano, muy propia del Individuo; [1] así como la amistad o el amor universal. Supone ser capaz de una mayor perspectiva, de imaginar, de sentir la presencia de alguien que no lo está físicamente. Eso supone no ver al otro como si sólo fuera un cuerpo; sino que debe tenerse conciencia de él como una mente, como un "espíritu" si se prefiere, relacionándonos con él de esta manera y en este nivel.

Por supuesto, la fidelidad es diferente al apego. Quizás no sea siempre fácil distinguirlos. La fidelidad es una cualidad y algo positivo, mientras que el apego no lo es. Ser fiel a alguien conlleva valorarlo por sí mismo; cuando se está apegado a alguien se está esperando algo de él para uno mismo.

He observado que los hombres y las mujeres pueden tener muy buenas relaciones, incluso relaciones sexuales, llevando vidas muy independientes y viéndose de vez en cuando. Si ambos tienen ya firmemente emplazado el ideal de la Iluminación en el centro de su mándala, han encontrado algo que compartir- su vida ya no se centra en torno a su relación de pareja y entonces, paradójicamente, la relación comienza a ser más satisfactoria y pueden relacionarse más como seres humanos. Puede establecerse un buen equilibrio entre verse con la necesaria frecuencia como para sentir que hay una continuidad en el contacto, pero no tanto como para llegar a sentirse atrapado o llegar a aburrirse de la compañía del otro.

Dicho de otro modo, si se está comprometido con la vida espiritual o comprometido con el desarrollo personal; si se puede ver al compañero sexual sin demasiada frecuencia; si se vive en comunidades del propio sexo; si se tiene fuertes amistades desprovistas de intereses sexuales; y si se tiene una clara determinación para desarrollarse espiritualmente con la ayuda de la meditación, del estudio del Dharma, de actividades altruistas, de retiros.... será mucho menor el riesgo de sobrevalorar la relación sexual.

25. Obviamente muchas parejas viven juntas para sacar adelante a su familia. Podrían argumentar que tener y criar hijos es por sí mismo un desafío espiritual... ¿Estás de acuerdo?

Bueno, cualquier actividad humana puede contemplarse desde su aspecto espiritual. Siempre existe la posibilidad de actuar de una forma hábil [11] y positiva o de una manera negativa y torpe...
Supongamos que llueve. Se puede tener una respuesta positiva ante el hecho de que está lloviendo; pero ¿significa eso que la lluvia, en sí misma, es una experiencia espiritual? Pues lo mismo ocurre con los niños.

Se les puede sobrellevar con amabilidad y paciencia, como práctica espiritual; pero eso no significa que tener hijos sea, en si mismo, una experiencia espiritual mayor que lo que puede serlo la climatología.
El crecimiento de los hijos y la ayuda a su ser en el mundo, puede ser una tarea desafiante y creativa; pero yo diría que en el mundo ya hay seres de sobra, quienes nunca han tenido esa ayuda y que la necesitan. Puede que fuese mucho mejor para nosotros dirigir nuestra atención hacia ellos.

26. Incluso así, y como mencionabas hace un momento, tener hijos es un asunto importante -y una fuente de conflictos- para algunas mujeres ¿Podrías ofrecernos alguna orientación general?

Hace algunos años no habría podido aventurar la más mínima orientación general. Ahora lo haré. Algunas mujeres de AOBO han experimentado tremendos conflictos entre su genuino deseo de llevar adelante un compromiso espiritual y el deseo de tener un hijo. Después de discutir bastante este tema con muchas mujeres y tras observar a las mujeres con hijos dentro del Movimiento, he llegado a la conclusión de que, si una mujer tiene un deseo genuino de seguir la vida espiritual, el hecho de tener hijos no la apartará del camino por mucho tiempo.

Por supuesto que estará durante dos o tres años muy atada por el niño: no podrá ir a centros de retiros, incluso quizás no pueda asistir a clases en el Centro Budista, ni podrá acudir a las reuniones de la Orden... Y deberá tener mucha paciencia... Pero el período de casi total dependencia del niño con su madre tiene un final. Cada año la madre va siendo un poco más libre y, si sigue vivo su interés previo por la vida espiritual, y si su compromiso había sido genuino o sincero, éste emergerá otra vez y podrá expresarse nuevamente... Si el compromiso no es muy firme es probable, aún sin tener un hijo, que se abandone la vida espiritual. ¡Los hombres también se alejan de la vida espiritual sin haber pensado jamás en tener un hijo!

27. Creo que has dicho que la actividad sexual y las actitudes heterosexuales pueden tener un efecto polarizador en el individuo, llevándolo a un tipo de desarrollo unilateral ¿Puedes decirnos un poco más sobre esto?

Si se está involucrado en una relación heterosexual se piensa en uno mismo como "hombre" y en la otra persona como "mujer"; o en uno mismo como "mujer" y en la otra persona como "hombre"... En otras palabras, uno no se relaciona con su pareja como si fuera éste un Individuo, sino como si tan sólo fuera un hombre o una mujer... Por ello, sólo tiene la oportunidad de expresarse la mitad de su "naturaleza" ; el ser humano no es sólo "hombre" o "mujer" sino que además tiene muchos otros aspectos potenciales.. . Si uno se relaciona predominantemente como miembro de este o ese sexo, no está fomentando el desarrollo de las características y cualidades asociadas con el sexo opuesto. Su desarrollo se torna unilateral psicológicamente y, quizás, hasta espiritualmente.

Así encontramos al hombre que es muy "macho" o a la mujer extravagante fémina, en quienes las cualidades complementarias del sexo opuesto no tienen la oportunidad de desarrollarse. Un ser humano debe intentar desarrollar todo el espectro de cualidades humanas, tanto las llamadas "masculinas" como las llamadas "femeninas" y, de este modo -expresándolo en términos de género- convertirse en un ser andrógino. Esto no significa que haya que ser bisexual. La persona puede seguir relacionándose sexualmente con parejas del sexo opuesto, pero si se es psicológicamente andrógino, ya habrá desarrollado las cualidades psicológicas y espirituales de ambos sexos, de acuerdo a la terminología utilizada.

28. Hay un menor riesgo de polarización, atadura o proyección psicológica en las relaciones homosexuales que en las heterosexuales?

Es muy difícil generalizar. Tengo la impresión de que, entre los hombres que podríamos denominar "homosexuales puros", las relaciones tienden a ser bastante turbulentas. Cuando se trata de hombres no puramente homosexuales, pueden establecer relaciones en las que hay cabida para el sexo, pero sin darle demasiado importancia.

En el caso de las mujeres es distinto hasta dónde he podido ver - y, por supuesto, estoy generalizando - las relaciones sexuales entre mujeres pueden desembocar en una fuerte dependencia emocional, un tanto pesada. En la vida de la mujer el sexo -y las emociones que éste involucra- juegan un papel mucho más preponderante y, en cierto modo, constante, que en la vida del hombre. Por ello, cuando dos mujeres están juntas, su relación tiende a estar más cargada emocionalmente.

29. ¿Crees que la gente que intenta clarificar su sexualidad podría beneficiarse experimentando con la homosexualidad?

No creo que convenga probar la homosexualidad -ni la heterosexualidad si fuese el caso- a partir de una base puramente racional. Sencillamente no funcionaría. Lo esencial es que se produzca una atracción natural ya sea sexual o de otro tipo.

30. ¿Existe alguien que sea cien por ciento heterosexual o cien por ciento homosexual?

Hay gente que parece ser cien por ciento heterosexual y no tener ni la más mínima inclinación homosexual, pero es muy difícil estar seguro. Lo que hay que decir es que la mayoría de la gente, bajo ciertas circunstancias, puede llegar a encontrar una cierta satisfacción sexual con personas de su mismo sexo.
Pero no hay que convertir esto en todo un fenómeno. No nos apresuremos a etiquetar a la gente como "homosexual" o "heterosexual". Se habla de actos homosexuales y de actos heterosexuales, pero ¿acaso puede hablarse de individuos heterosexuales y de individuos homosexuales?

No me gusta oír hablar a la gente en términos de su preferencia sexual o refiriéndose a sí misma como "gay"; produciendo la impresión de que su identidad sexual fuese lo más importante de su persona. No les increpo demasiado esto porque sé que es una reacción contra años -o siglos- de represión dirigida hacia las personas involucradas en actos homosexuales por parte de la gente que no se involucraba en una relación de ese tipo; pero, en cualquier caso esta situación resulta desafortunada.

Y esto nos conduce a un tema que creo que es un problema grave para los hombres occidentales, y especialmente para los practicantes budistas.

La amistad espiritual es muy importante, y sólo puede establecerse sobre una base de amistad cotidiana. La amistad implica proximidad, confianza mutua, intimidad e incluso contacto físico. Para muchas personas en Occidente el contacto físico sólo se produce dentro del ámbito del sexo y, por tanto, se tiende a confundir los dos y a considerarlos inseparables. El contacto físico puro resulta, por ello, poco común, especialmente entre hombres. Generalmente, si se trata de otro hombre, no hay "riesgo" de implicación sexual; aún así, los hombres tropiezan con enormes dificultades para permitirse el contacto físico con otros hombres a causa de su miedo a la homosexualidad. He visto casos de hombres que muestran miedo hasta de darse un fraternal abrazo. Y, a veces, superar este temor les supone años; y cuando lo logran, se sienten muy gozosos, muy liberados... Como si realmente hubiesen logrado un auténtico descubrimiento... Esto ilustra la terrible confusión en que estamos metidos y el cómo, algo tan simple, puede crear un enorme problema.

Durante el tiempo que viví en el Vihara Budista de Hampstead practicaba un estricto celibato. A pesar de ello, recuerdo cómo algunos se sentían de molestos por mi intimidad con mi amigo Terry Delamare. Mientras que hubiera resultado más apropiado que tomasen ejemplo de lo que era una relación totalmente platónica -ni siquiera era una relación en un sentido estricto, ni mucho menos sexual-. El quid de la cuestión estaba, al parecer, en la incapacidad de la gente para creer que pudiese existir una amistad íntima entre dos hombres sin una connotación sexual.

Las mujeres están, en general, menos inhibidas en este respecto. No dudan en abrazarse o en rodear la cintura de otra; incluso se besan con cierta facilidad. Los hombres ni siquiera sueñan con hacer ese tipo de cosas: se controlan. Así pues, con frecuencia, limitan sus posibilidades de amistad con otros hombres. Y por tanto, si no desarrollan amistad con otros hombres tampoco desarrollan amistad "espiritual" con otros hombres, no están capacitados para desarrollar lo que el Buda declaró como el elemento más importante de la vida espiritual. [15]

31. ¿Que deberían hacer entonces los occidentales en este sentido?

Se debe acabar con el temor a la homosexualidad, enfrentarse a ella y perder miedo al contacto sexual con otros hombres.
Esto no significa que se deba tener un contacto sexual, sino por lo menos se debe perder el miedo a la idea. Deben descubrir que el contacto físico, incluso el contacto sexual entre hombres, es sólo contacto físico o sexual entre hombres. Es algo muy normal, y el miedo hacia ello puede entorpecer el desarrollo de amistades.

32. Creo que, hace tiempo, te involucraste en un "experimento" sexual de este tipo ¿Puedes decir algo al respecto?

En 1967, cuando regresé de la India para iniciar el AOBO, hubo una serie de charlas acerca del lugar que ocupaba el sexo en la comunicación, y pensé que quizás debería experimentar un poco en ese campo.
Por aquel entonces todo parecía estaba en cambio. Yo estaba, hasta cierto punto libre para hacer lo que quisiera y lo que creyese mejor. Era un momento muy importante, muy creativo: yo daba todas esas clases, todas esas conferencias.-Y era también mi período "experimental" con drogas alucinógenas, el período en el que me dejé crecer el pelo... Se podría decir que empezaba a "tantear", a buscar mi estilo y mi entorno. Siempre me he dejado llevar por la intuición -tengo una gran tendencia a hacer, y a preocuparme por las consecuencias después-. Estoy seguro de que el apetito sexual jugó también su papel en el "experimento"; pero, con certeza, hubo mucho más de intuición que de apetito.

33. En la Grecia clásica se fomentaba la amistad, cargada de erotismo, dentro de la educación, especialmente entre los más mayores y los adolescentes ¿Te referías a algo de este tipo?

No, en absoluto se trata de este punto de vista. He tenido cientos de alumnos y discípulos sin que hubiese ningún elemento sexual en la relación. Cuando abordé mi período "experimental", no fue en el contexto pedagógico sino en el de la amistad normal. Desde luego que se puede aprender de los amigos, pero el experimento no formaba parte de la educación de nadie. Sólo estaba explorando ciertas cosas en beneficio propio, para satisfacer mi curiosidad.
Pero, incluso ahora, no creo que pueda explicar qué es lo que pretendía intuitivamente -sin sentarme a escribir seriamente sobre ello, sin realmente desentrañarlo y preguntarme qué sentía en verdad-. Es mi intención describir esta época de mi vida en un libro autobiográfico que espero publicar en los próximos años. [16]

34. ¿Qué conclusiones sacaste de ese período de experimentación?

Una de mis conclusiones fue que el sexo no jugaba un papel realmente importante en la comunicación humana. El contacto físico funciona a veces para dar un paso adelante en la comunicación; pero no resulta un adelanto permanente: sólo proporciona una cierta oportunidad para que la auténtica comunicación pueda desarrollarse. A veces el adelanto se acaba y las cosas vuelven a ser como antes. De hecho, esto es lo que ocurre casi siempre. Por eso llegué a la conclusión de que el contacto sexual no era de gran ayuda para el desarrollo de la comunicación y retomé entonces el celibato.
A la vez, puedo afirmar que algunas personas con las que he tenido contacto físico -no sexual-, se liberaron del miedo a la homosexualidad, y están capacitadas para desarrollar amistad más fácilmente -no me refiero a amistad sexual- con otros hombres.

35. En los primeros días del AOBO parecías muy paciente con nuestra tendencia a las distracciones sexuales y a la indulgencia sexual. ¿Eras tan tolerante y permisivo como parecías?

¡No tenía más remedio que ser paciente! Estaba empezando -en los "permisivos" años sesenta- con personas que eran completamente novatas en el budismo. Tenía más interés en que la gente pudiese desarrollar cierta simpatía hacia los ideales del budismo, y en ir llevándola poco a poco en la dirección de esos ideales. No adopté la postura de: "Deben desprenderse de todos sus actuales ideas y comportamientos equivocados y, entonces podremos empezar a hablar de budismo". Simplemente no habría funcionado. Por tanto, seguí básicamente lo que después denominé el "Sendero de pasos irregulares". [17]

36. ¿Temiste que el AOBO pudiese desaparecer tras una nube de permisividad sexual?

La permisividad sexual no era el único peligro. No debemos centrarnos demasiado en ello, aunque ahora estemos explorando el tema del sexo. El AOBO pudo desaparecer por todo tipo de razones; y sigue teniendo el riesgo de desaparición, especialmente la Orden. Hasta que no haya bastantes miembros que hayan "entrado en el Flujo". [3] De no ocurrir esto, no prevalecerá el compromiso espiritual, ni prevalecerá el compromiso con las Tres Joyas ni se podrá llegar a nada.

37. ¿Crees que nosotros, aquí en Occidente, necesitamos esforzarnos más para mejorar nuestra comprensión sobre el tercer precepto que aquéllos de culturas más tradicionales de Oriente?

Me parece que aquí en Occidente tenemos que luchar contra un mensaje cultural que sobre valora el sexo como un bien indescriptible. Todavía hoy en día hay mucha gente que cree que, en la medida en que no se haga daño, se puede disfrutar -se debe de tener tanto sexo como se quiera-. Esta actitud refleja la escasa comprensión sobre el hecho de que, para el desarrollo de la vida espiritual, el sexo debe ocupar un lugar muy periférico.

Vivimos en una época de transición. Antes, el gran inhibidor, sobre todo para la mujer, era el riesgo de embarazo. La desaparición de dicho riesgo, al menos hasta la aparición del SIDA, nos llevó a sentirnos libres para involucrarnos en relaciones sexuales sin el miedo a las consecuencias. Y esto obviamente alteró las actitudes frente al sexo... Pero existen efectos secundarios: los anticonceptivos conllevan ciertos riesgos; lo que conduce a las mujeres a cuestionar si la promiscuidad sexual es realmente tan satisfactoria psicológicamente como se dice, o si es incluso saludable. Quizás, dada la libertad con la que actualmente se puede practicar el sexo, resulte desproporcionada ésta, en su conjunto, comparada con la atención que se le presta.

38. Muy recientemente nos has estado animando a pensar más seriamente sobre -y a centrarnos decididamente hacía- el tema del celibato...

Bueno, al principio la mayoría de nuestros miembros de la Orden tenían alrededor de veinte años de edad... No se puede realmente pedir celibato a personas de esta edad. Pero aquellos jovencitos hoy en día ya rondan los cuarenta. La gente de esta edad, ya puede empezar a plantearse el celibato con seriedad; y no pido más que eso: que se empiece a pensar en ello con seriedad.

39. Aunque estarás contento de que algunas personas estén tomando los preceptos de Anagárika --que incluyen el "voto" de celibato-.

No sólo estoy contento sino también complacido de que así sea. Están realmente tomando un compromiso público... mostrando su bandera - de color azafrán [18] si se prefiere - pero nunca he animado a nadie a tomar un voto de celibato. Cuando alguien me dice que desea hacer un voto de este tipo, yo siempre, invariablemente, le contesto que lo piense mucho más.

Se puede ser miembro de la Orden Budista Occidental -OBO- sin ser célibe. Sólo se pide que se coloque la vida sexual en la periferia, hacia la periferia, del mándala personal... O al menos no demasiado cerca del centro. Pero si alguien puede ser célibe sin caer en actitudes neuróticas, si lo desempeña de una forma positiva y sana, estoy seguro de que este tipo de celibato facilita, -al igual que otros factores- un desarrollo espiritual más rápido; y de que ayuda a que la persona se sienta más libre para emplearse en el Dharma y en otros seres humanos.

40. ¿Cuál sería la diferencia entre un celibato "neurótico" y "sano"?

Se puede ser célibe porque encontrarse tan absorto en la belleza y el atractivo del ideal espiritual que el sexo ya no tiene interés. Ésta sería una forma de ser sexual muy sana. Y se puede ser célibe para sentirse libre de culpa, o para tener ciertas ventajas materiales ... 0 por todo tipo de razones bastante negativas, que serían neuróticas.

No es sólo una cuestión de ser célibe. Ser físicamente célibe probablemente tenga, por sí mismo, muy poco valor. Es más valioso ser relativamente célibe, debido a que la mayor parte de la energía emocional está en niveles elevados. No se puede ser sana y felizmente célibe a menos que sea a causa de una entrega hacia un elevado ideal humanitario, artístico, cultural, o por un fuerte interés espiritual. Se podría incluso decir que la frustración sexual aparece cuando no se tiene en el centro del mándala un ideal capaz de absorber la energía emocional.

41. En "El Udana", [19] Sundarananda se queja de que su mente está siempre ocupada por la hermosa mujer que dejó atrás al hacerse monje. El Buda le conduce a un mundo paradisíaco y le muestra diosas de mucha mayor belleza. ¿Qué significado tiene esto para nosotros?

La experiencia de Sundarananda representa el contacto con una belleza mucho más refinada que la belleza corriente. Entonces empieza a sentirse menos atraído, menos atrapado, por la belleza mundana inferior.
No creo que, mientras se esté en el nivel de belleza humana, se pueda sencillamente prescindir de ésta. Hay una sola razón para hacerlo: haber vislumbrado una sublime y paradisíaca belleza.

42. ¿Entonces qué hay que hacer? ¿Visitar más el museo de arte?

Una visita al museo de arte no debe despreciarse. Disfrutar la música refinada o participar en alguna actividad creativa... Eso puede, ciertamente, absorber energías...

Y, por supuesto, contarnos con la meditación. Antes de desarrollar la Visión Clara [20] oscilas entre el deseo y la experiencia sexual, y el estado libre de dicho deseo. Con el fin, de progresar en la vida espiritual -mientras se continua con el sexo- hay que asegurarse de que su relevancia sea periférica y de que se está mentalmente libre de la dependencia del deseo sexual por períodos largos de vez en cuando, lo cual contribuirá a que alcancemos niveles de conciencia más elevados, a partir de los que desarrollaremos la Visión Clara. Cuando empieza a desarrollarse la Visión Clara, se destruye la atadura desde la raíz. Y todo lo que queda por hacer es estar alerta para que no se produzca otra atadura.

43. Luego hay una especie de camino gradual hacia el celibato: un ir asumiendo cosas, desarrollando introspección, añadiendo este tipo de refinamientos a nuestra vida...

¡Así es!... Como la oruga que pasa de una a otra hoja: mientras sus patas traseras están todavía adheridas a una, sus patas delanteras se van encaramando a otra... Y no desplaza las patas traseras hacia la nueva hoja hasta que las delanteras están firmemente sujetas. Es casi imposible renunciar a todo a la vez, aunque algunas disciplinas lo prediquen: "¡Renuncia a todo por tu Dios!" "¡Renuncia a todo por tu Gurú!" No creo que sea humanamente posible: podría destrozar los nervios el intentarlo..; pero sí, al menos, continuamos llevando adelante la vida espiritual como el gusano que se agarra a la hoja con las patas delanteras. En cierto sentido, no importa si sólo tiene las dos patas delanteras en la nueva hoja y las veinte traseras en la anterior: al menos se está agarrando a la nueva hoja y procederá a desplazarse despacio hacia adelante.

En términos psicológicos y espirituales, no es tanto una cuestión de renunciar a lo viejo como de ir tomando lo nuevo mientras se está todavía, en cierta forma, involucrado en lo viejo, incluso atrapado en lo viejo. Es una cuestión de asegurarse de que nos estamos anclando en lo nuevo y de intentar afianzarnos a este nivel cada vez más. No hay que creer que no se está afianzado en lo nuevo solamente porque no se han relajado todavía completamente los apoyos en lo viejo. Hay grados de celibato. Todo el mundo es célibe en cierto modo y todo el mundo no lo es en cierto modo. Nadie está todo el tiempo inmerso en actividades sexuales en un sentido físico, y nadie -excepto los Budas y Bodhisattvas- es célibe en cuerpo, palabra y mente todo el tiempo. Debería entenderse mejor, por tanto el "principio del celibato", el llamado Brahmacharya en el budismo. Puede traducirse como "vida divina" o "vida angelical", y representa la transición desde las esferas inferiores hasta las superiores, desde el kamaloka hasta el rupaloka, desde el rupaloka hasta el Brahmaloka. Brahmacharya significa, literalmente, "caminar con o andar con". Brahma significa "estado espiritual sublime".

Cuando se es célibe en cuerpo, palabra y mente se mora en ese estado. Lo que se intenta es vivir permanentemente en ese estado. Algunos se acercan mucho, otros no tienen mucho éxito en su acercamiento... Pero se podría afirmar que todos están en ese camino, aunque sólo sea por casualidad.
Si se lleva una vida específicamente espiritual, si se tiene un compromiso con la aspiración Brahmacharya se debe, por supuesto, intentar ser cada vez más y más célibe... Si, por ejemplo, se tiene una relación sexual semanal, se puede intentar pasar a una quincenal o mensual, o incluso anual -como hacen algunos-. De esta forma, se aparta uno gradualmente del apego al mundo material, de los sentidos, de los placeres torpes; experimentándose y pretendiéndose placeres positivos cada vez más intensos.

Concibo el AOBO, y especialmente la Orden, como algo que nunca se queda quieto. Me encantaría ver que todos los que participan en el movimiento y en la Orden cada día de su vida son un poco más célibes.
No pido a nadie que abandone el sexo de golpe. No espero eso. Pero espero, al menos, ver que la gente progresa un poco cada día, renuncia a un poquito de sexo cada día y que, con los años, la diferencia en su deseo sexual sea apreciable. Espero, por tanto que la actividad sexual juegue un papel cada vez menor es su vida.

44. Has dicho algunas veces que, hasta donde puedes apreciar, la vida de los monjes es la vida más feliz que imaginas. ¿Hasta qué punto crees que el celibato es un factor de ello?

Bueno, debo definir primero qué entiendo por "vida de monje". No me refiero al formalismo monástico: al simple hecho de llevar hábitos amarillos y la cabeza afeitada, ni, desde luego, al hecho de practicar el celibato de forma neurótica. Por "vida de monje" me refiero a una vida totalmente dedicada al Dharma, una vida que, de un modo u otro, esté -por decirlo de algún modo - casada" con el Dharma. Creo que ésa es la forma de vida más feliz y he visto muchos monjes muy felices -en el sentido formal en Oriente. Con frecuencia, parecían éstos mucho más felices que los legos que presumiblemente disfrutaban del goce de todos los placeres mundanos. No digo que los monjes fuesen siempre estrictamente célibes, aunque a veces lo eran, pero... ¡sin duda lo eran mucho más que los laicos!... Y, al menos en este sentido, también eran más felices.

Notas:[1] En su pensamiento Sangharákshita usa los términos el “Grupo” y el “verdadero Individuo” con un sentido especial... Cuando habla del Grupo quiere decir la sociedad en general - o una sección de la sociedad – que condiciona a las personas que la pertenecen, imponiendo sus valores y su jerarquía. El grupo en este sentido limita la libertad del individuo. En contraste con un miembro del Grupo, el verdadero Individuo piensa por si mismo, evalúa y formula sus propios valores que no necesariamente corresponden con las ideas de la sociedad que le rodea. De esta manera está libre de sus condicionamientos, es más creativo y capacitado a seguir un sendero trascendental como el budismo.
[2] La Vinaya es el conjunto de las normas éticas que tienen que seguir los bikkhus (monjes budistas). Para saber más ver glosario > vinaya
[3] El término Entrar en el Flujo (sotapanna) proviene de los ramos más antiguos del budismo. Según la tradición, alguien que ha llegado a este punto del sendero ha despertado al primer nivel de conciencia trascendental y su progreso hacía la Iluminación es irreversible.
[4] En la ética budista se habla de tres campos de acción en los cuales ha que aplicar los principios éticos. Son -
Acciones del cuerpo (lo que hacemos)
Acciones del habla (las cosas de comunicamos)
Acciones de la mente (los pensamientos)
[5] El cultivo de la atención consciente es la base de la práctica budista. Ver textos acerca de la atención consciente.
[6] El theravāda es la forma del budismo que predomina en los países del sudeste asiático, como Camboya, Laos, Myanmar, Tailandia y Sri Lanka. Sus monje siguen un estilo de vida similar al Buda y sus discípulos, incluyendo el celibato. Ver textos acerca del Theravada.
[7] El Mahayana (literalmente el “gran vehículo”) es una de las tres corrientes principales del budismo (las tres Yanas). El Mahayana enfatiza el lado altruista de la practica espiritual y da menos importancia a la vida cenobítica y el celibato. El budista ideal en la tradición Mahayana es el Bodhisattva, una persona (laica o monje) en quien ha surgido el Bodhicitta (literalmente: Corazón de la Iluminación) – que es la determinación de alcanzar la Iluminación para el beneficio de todos los seres conscientes. Ver también: libros sobre Budismo Mahayana y ¿Qué es el Budismo Mahayana?
[8] El Vajrayana es el último de las tres Yanas. Es el budismo tántrico o “mágico”. En él se enfatiza la práctica de los mantras, los rituales, la iniciación y la relación con el guru. El Vajrayana también se enfrenta a los tabúes de la sociedad, utiliza el simbolismo sexual y – a un nivel más avanzado – las prácticas sexo-yogicas. Ver también: libros acerca del Tantra y el Vajrayana
[9] Vimalakirti. El protagonista del Vimalakirti Nirdesa, un texto importante del budismo Mahayana. Es un laico de la ciudad de Vaisali. Aunque vive en la ciudad como cualquier persona laica, está completamente entregado a su practica del budismo. Ver: Reseña del Vimalakirti Nirdesa
[10] Milarepa es uno de los santos tibetanos más venerados que vivió en el siglo XI. Era practicante del Vajrayana, pero fue completamente célibe. Ver: Reseña de la "Vida de Milarepa", su autobiografía
[11] En la ética budista en lugar de usar los términos “bueno” y “malo” se emplea los conceptos “hábil” y “torpe” (kusala o akusala). Una acción torpe estorba nuestro progreso hacía la Iluminación.
[12] Sangharákshita ha descrito el comportamiento “neurótico” en términos de “buscar satisfacción en algo que es incapaz de darla”. Por ejemplo: comer chocolate cuando uno siente una falta de afecto – el chocolate nunca va a suplir nuestra necesidad de afecto-.
[13] Los 5 preceptos normales son...
Con acciones bondadosas, purifico mi cuerpoMe comprometo a no hacer daño a los seres vivientes
Con generosidad sin limite, purifico mi cuerpoMe comprometo a no tomar lo que no me ha sido dado.
Con tranquilidad, sencillez y contento, purifico mi cuerpoMe comprometo a no tener una conducta sexual dañina.
Con comunicación veraz, purifico mi hablaMe comprometo a no mentir.
Con conciencia clara y lúcida, purifico mi menteMe comprometo a no consumir intoxicantes.
Sangharákshita ha propuesto una versión alternativa de ellos en términos de energía.
No obstruyes la energía de los demás.
No agotes la energía de los demás. Da libremente de tu propia energía.
No malgastes tu energía.
Para lograr cualquier objetivo, usa la energía apropiada y no una inapropiada.
No permites que tu energía llegue a ser turbia. Mantenla clara y luminosa.
[14] Dhyana (en Sánscrito o jhana en Pali) es el estado de absorción o superconsciencia que se alcanza en la meditación.
[15] En el Canon Pali ocurre la siguiente conversación entre el Buda y su amigo más cercano Ananda.
[16] Este libro ha sido editado en inglés con el título Moving Against the Stream
[17] Sangharákshita dio una conferencia en 1975 sobre este tema titulado The Path of Regular Steps and the Path of Irregular Steps. El sendero budista siempre se describe en términos de pasos secuénciales para avanzar gradualmente, sin embargo en realidad la vida espiritual de muchas personas no es tan normalizada. Generalmente intentamos practicar a un nivel demasiado avanzado y descubrimos que tenemos que volver atrás para repasar las etapas que hemos saltado. Para escuchar la conferencia original o leer una transcripción (en inglés) ver The Path of Regular Steps and the Path of Irregular Steps
[18] Los hábitos de los monjes célibes (bikkhus) son de color azafrán.
[19] El Udana es un texto del Canón Pali. Nanda (o Sundarananda, Nanda el guapo) fue el primo y medio-hermano del Buda. Se convirtió en monje célibe pero tuvo dificultadades practicando la meditación ya que no podía dejar de pensar en la novia que había dejado. Leer una reseña del Udana
[20] Visión Clara es una traducción de Vipassana. Leer más sobre Vipassana.